Las miradas de los guardias le taladraban la cabeza y un sudor frio le recorría la espalda, provocándole más temblores que la botella vacía que sujetaba hasta dejarle los nudillos blancos.
Con un suspiro a modo de plegaria se preparó. Lentamente levantó su arco sin mirar al objetivo. El silencio se hizo presente, como un espectador más en la plaza del pueblo.
Haciendo un esfuerzo levantó la vista. Allí estaba, apenas a cien pasos: Una manzana, fruta presente en el pasado de la humanidad y ahora fundamental en la vida de su familia. En ese momento recordó las palabras de su rey:
–Si sois capaz de cazar los ciervos de mis dominios no os será difícil esta tarea, mas para motivaros pensad que os jugáis la vida de vos y de los vuestros.
Con el corazón palpitándole en las sienes, como un macabro reloj, tomó aire y disparó la flecha.
Un ruido seco resonó en la plaza al atravesar el proyectil la manzana, clavándola al poste.
Se escuchó el grito ahogado del arquero, que tras la alegría distinguió a su hijo sujeto al poste por las dos flechas que había disparado antes de acertar con aquella última...
Foto de agaudi.wordpress.com
Si te ha gustado vótanos en la categoría de cultura.
Luego ya se sabe, los detalles se olvidaron, pero esto fue lo que pasó en realidad ... ;)
ResponderEliminarJajajaj, muy bueno, después de todo no era tan buen arquero como nos cuentan.
ResponderEliminarQue cruel resultò...y yo qe habìa vivido co la ilusiòn toda mi vida...jajaja
ResponderEliminarmagnìfico...
Vaya, no sabía que en realidad pasó eso... Aunque yo que él habría apuntado al rey.
ResponderEliminarUn beso,
Mun
Jajajjaja Me gusta como retuerces la historia. Tiene su punto, sin duda.
ResponderEliminarA la tercera va la vencida, pero nos uelen explicar que pasa con las otras 2.
ResponderEliminarUn buen relato:)
Saludos^^
yo jamás me creí eso de darle a la manzana a la primera xD
ResponderEliminarUn chiste malo (del estilo de los de la cena en la pizzería que os relaté en círculos abiertos):
ResponderEliminar"¡Guillermo, Guillermo!¿Tell? Cuenta, cuenta..."
jijijiji ya me parecía a mí demasiado increíble la historia, ahora me encaja.
ResponderEliminarBiquiños!
Y acierta por inspiración de Guillerme Tell.
ResponderEliminarUn saludo y un canto de ballena. =)
Muy duro el final, muy bueno el relato.
ResponderEliminarSaludos
NUEVO BLOG
ResponderEliminarhttp://noalatelevisionbasura.blogspot.com/
Hola Deprisa!
ResponderEliminarA la tercera fue la vencida :)
Bien relatado. Conciso pero sin descuidar detalles.
saludos
sílvia
Como te lo curras, me encanta este micro relato... yo estoy escribiendo un libro, vamos llevo un año y dos o tres capitulos escribir es algo que me encanta pero me lo tomo con calma. Enhorabuena!
ResponderEliminarChosssssssss!!!pero xa qué siguió disparando...menuda tortura y fuerte ego herido!!!jajajaja
ResponderEliminarM encanta, m he partido d la risa!!!
Saludos de la chica mitológica ;-)
Jeje. A la tercera la vencida (si es que se puede llamar victoria a eso)
ResponderEliminarCarpe Diem
me recuerda a guillermo tell, me equivoco??
ResponderEliminarEsta vez la vida le dió hasta una tercera oportunidad. Algo que no suele ocurrir.
ResponderEliminarNo obstante no se equivocó, también dice -la llamada vida- que quien persiste lo consigue. Toda una viva imagen de que esto, no cabe duda, así es.
Pero, de qué arquero hablas???
ResponderEliminarUn besitooo!!!!
buf...
ResponderEliminarme dejas helado
Es que entre el parkinson del padre y el nerviosismos del hijo...
ResponderEliminarY que la manzana en realidad era una uva.
Así no hay quien pueda...
jajajajaja, si nos contaran las "tomas falsas" de todas las películas, otro gallo cantaría....
ResponderEliminarMe gusto mucho el relato, tiene un final inesperado o_o
ResponderEliminarSaludos!
Hola Deprisa!
ResponderEliminarcada vez me gusta más este blog. Si te soy sincero aún no he realizado mis votos (tengo hasta el 17!) pero da por hecho mi voto a mejor blog de cultura. Saludos.
¡Vaya! Habría que afinar esa punteria. ¿Tenia muchos hijos?
ResponderEliminarPero que grandes son tus revisiones historicas o literarias,amigo Deprisa....
ResponderEliminarUn aplauso y nos vemos.
La intención era buena, además todo el mundo sabe que los tiros de prueba no valen.
ResponderEliminarUN saludo.
Trabajar bajo tanta presión no siempre es tan bueno.
ResponderEliminar¿De verdad era su hijo el que estaba atado al poste?...¿yo hubiera apostado a que era el hijo del rey?...¿habéis mirado bien?...;-P
ResponderEliminarSaludos.
Arwen
No! He entrado desde "absurdidades", puesto que te tengo referenciado en los blogs express y en el personal en español, así me és más facil. Tengo agotado el cupo de votos, sinó tendrias el mio aunque veo no te hace falta. Suerte
ResponderEliminarUn abrazo
jajajaj, muy instructivo este relato
ResponderEliminarahora se ha develado otro misterio más en la historia de una manzana jajajja
Me encantó... aunque yo no le hubiese atinado tampoco...
ResponderEliminarSaludotes deprisa :D
palabras.
ResponderEliminarcomo flechas
directas al corazon.
y alli clavadas como espinas.
causar un efecto tal
que dibuje sonrisas en el rostro
y luz en la mirada.
Desde una habitacion en la joven Buenos Aires te dejo un calido beso
Ya se sabe, si hay prensa por ahí...
ResponderEliminar;)
Besicos
Punteria. Ultimamente a mi me falta, espero que no me pase esto de a la tercera va la vencida...
ResponderEliminarUn beso!
Pues acertar a la tercera, con un botella pimplada. Pues que quieres que de diga tiene su mérito. La fama que ha llegado a nuestros días es más qué merecida.
ResponderEliminarmecachis
ResponderEliminarclostridium me ha chafado el chiste
saludos desde murcia
sigue con los relatos, que molan mucho
Q gore!!!! XD Muy bueno...
ResponderEliminarufffff vaya mal terminó eso...
ResponderEliminarbesitosss
Me acabo de enterar que el blog va de primero en categoría de cultura...muchas felicidades y no es para menos...ya se esta poniendo bueno la cuenta atrás de mi blog no?...pues ponte el cinturón de seguridad que vienen curvas
ResponderEliminarAtención, comentario aguafiestas a la vista ;):
ResponderEliminarLo mismo que suelo decirlo cuando algo me ha gustado, considero que también hay que decirlo cuando algo no (no sé si estaréis de acuerdo). Creo que este minirrelato no está tan conseguido como el resto, está poco... "pulido"; no sé exactamente por qué pero la lectura y comprensión resulta un poco difícil (el lector se entera más por su conocimiento de la historia, a la que aplica la vuelta de tuerca, que por el relato en sí).
Saludos :),
Paula
A mí me gusta más este final, es mucho más realista ;) Ciertamente un gran relato, para leerlo deprisa y analizarlo despacio...
ResponderEliminarUn saludo!
Pero es que este hombre no se dio cuenta nunca de que le hacían falta gafas??????
ResponderEliminar^^
Impresionante el microrelato, como siempre, me quedo con ganas de más.
ResponderEliminarMe gusta pero......hay cosas que no entiendo (como de costumbre). ¿Cómo va a estar su hijo clavado al poste donde más tarde se clavaría la manzana y no lo ve, o vamos, que no se da cuenta que lo ha "fusilado" contra el poste? Bueno,espera que ahora lo entiendo, estaba tan concentrado que no se dió ni cuenta, vale, era un gran arquero pero un padre malísimo. Por otro lado, tampoco entiendo porque el niño con dos flechas clavadas en su cuerpo era capaz de mantenerse firme, sosteniendo la manzana, ¿no movio ni la cabeza? Ese chaval era un santo.
ResponderEliminarRARO; en este relato hay cosas que no entiendo,incomprensibles, como la vida misma...por eso me gusta, por su realismo.
Un saludo
Muy buen relato y muy cruel también. Me encanta tu manera de atrapar al lector en tus tramas. Felicidades!!!
ResponderEliminarGracias por tus comentarios.
Te sigo
Virginia Palomeque
tres tiros por un peso !
ResponderEliminarMas que cruel. Me dejo un desazon!!!
ResponderEliminarUps... :S
ResponderEliminardirty saludos¡¡¡¡
ah por cierto.. Linkeame desde tu web..ok ? un saludo y nuevamente gracias.
ResponderEliminarJajajaja... muy bueno. Eres un artista eh ;)
ResponderEliminarPero... La historia podría tener tantos finales como elijan los que la viven en cada momento, en cada época...
ResponderEliminarYo quizás me quede con la clásica para poder dormir bien esta noche.
;)
Buenísimo el giro
Ya nunca volvió a sostener un arco.
ResponderEliminarSaludos,
y zas el flechazo le cayó en la cabeza para variar, jejejeje
ResponderEliminarEl arquero era bueno, muy bueno, sin duda es muy difícil acertar a una manzana y más, si disparas bajo presión.
ResponderEliminarEl bloquero es bueno, muy bueno, sin duda es difícil hacer un relato lleno de contenido con tan pocas palabras.
Un saludo.
Uff, crudo crudo, como siempre. Y como siempre, ¡me ha gustado!
ResponderEliminarMuy buen microrelato. Estos días he estado ausente, voy a tener que echar un ojo a todas tus actualizaciones. Ya tengo curro mientras se hace la comida, juju.
Saludos.
¡¡¡Uuuffff!!!, sorprende más este final para la historia de Guillermo Tell, pero de habérmela contado cuando era una cría… me habrían traumatizado para toda la vida.
ResponderEliminarBien narrado. Final pasmoso. Me ha gustado la historia.
Saludos.
S. Cid